miércoles, 9 de mayo de 2007

Conciencia en campaña

El concepto de lo que denominamos conciencia nos alude a una cierta reflexión de nuestro conocimiento, de discernir la bondad de la maldad. La conciencia nos aconseja, nos marca el camino hacia donde es mejor para nosotros mismos; marca nuestro rumbo.
Conciencia reflexiva de la que voy a hacer uso para desarrollar este articulo.
Al observar la actualidad política en todas sus dimensiones hay muchas cosas que creo que no las entiendo, pero luego, reflexiono y me doy cuenta de que no las entiendo porque en realidad son poco creíbles para mí. ¿ Son poco creíbles para mí porque la realidad que me imagino de las características de una campaña política no concuerda con lo que en realidad se caracterizan?
¿Es poco creíble porque resulta que no soy tan ingenuo, y que sé cómo debería ser una verdadera campaña de los políticos?
O simplemente me convendría bajar a tierra y ver las cosas tal cual como son, tal cual como suceden.
Me niego.
Me niego a aceptar el modus operandi que utilizan los candidatos para hacer campaña hoy en día en nuestra política.
Me niego porque siento que mi conciencia me advierte sobre algo que no está tan bien como parece.
Me esmero en poner mucha reflexión antes de desarrollar el tema porque la verdad es que es un tema muy profundo y que condiciona en el momento de hacer valer nuestra libertad de ciudadanos y como tales elegir a nuestros mandatarios en el momento del voto.
Mi gran preocupación ante todo se concentra en cómo los candidatos hacen campaña, qué mensaje le pasan a quienes los tienen que elegir, qué idea de idiosincrasia tienen de su sociedad para comunicarles de una forma u otra sus propuestas, sus planes, etcétera.
Hay formas y formas. Lo que definirá la forma del candidato de hacer campaña es su idea de ciudadanos en su conjunto a los cuales se está dirigiendo, ¿ciudadanos concientes de las cuestiones políticas, pertenecientes a una sociedad que le interesa los asuntos públicos y que no es tan ingenua para creer en mensajes insignificantes y sin contenido real? ¿O bien se dirigen a una sociedad desinteresada de las cuestiones públicas tal como es elegir a su dirigente político, una sociedad que se puede manipular, convencer fácilmente y luego al fin y al cabo engañar?
Yo creo que nuestro tipo de sociedad está bien definido. Yo veo y siento que a nuestra sociedad le interesa quién la va a dirigir. A nosotros, los ciudadanos, nos importa y nos afecta y mucho quién va a ser nuestro líder. Y tampoco queremos que nos engañen, tampoco queremos que los políticos se pongan las pilas únicamente en época de campaña.
Es por eso que a nuestros candidatos les es mas conveniente, creo yo, elegir una forma adecuada y acorde a quienes se dirigen cuando nos quieren hacer conocer quiénes son, cuáles son sus proyectos, etcétera.
Esa forma adecuada y acorde es la que no veo en los recientes afiches de los candidatos a Jefe de Gobierno y a diputado, de la cual tengo un ejemplo específico.
Distintos lemas y mensajes nos comunican los candidatos para que los elijamos, para que veamos una buena imagen de ellos y el futuro de nuestra nación, para que confiemos en ellos y para que, por lo tanto, se hagan partícipes en nuestro voto.
Uno de los mensajes (junto a otros de varios candidatos a Jefe de Gobierno) en el cual mi conciencia de ciudadano votante se alborotó frente a la aberración por su insignificancia del contenido del mensaje fue uno publicado por el Dr. Ginés González García, candidato a legislador porteño. El mensaje es el siguiente

"Dice lo que piensa. Hace lo que dice" .

Cuando leí por primera vez este cartel afiche me quedé sorprendido, porque era el perfecto ejemplo que me faltaba para saber que yo no estaba tan equivocado acerca de los insignificantes mensajes y lemas sin importancia que los candidatos comunican continuamente a su comunidad.
¿Cómo puede ser que un candidato, un ACTUAL Ministro del ejecutivo de la Nación Argentina, se dirija de ese modo a su pueblo, a su nación con el fin de que éste lo elija para que junto con otros actuales políticos que hicieron y hacen lo mismo que él en su candidatura dirijan el crecimiento, el desarrollo y el camino hacia la madurez y el progreso de nuestra nación.
O son ellos los incapaces, los ineptos, los irrespetuosos o en realidad son tan inteligentes como para notar hacia dónde y por qué se guía nuestra sociedad que creen que esos mensajes nos convencerán de que los votemos.
Es verdad que en un afiche no se pueden publicar todas la propuestas, pero tampoco se puede publicar un juego de palabras que en la realidad sabemos todos que es todo lo contrario.

Los llamo irrespetuosos porque sentí que me faltaron el respeto, que me consideraron un necio, un oligofrénico y un imbécil, que con ese tipo de campaña, con ese tipo de lema estúpido me iban a convencer de que "dicen lo que piensan" y de que "hacen lo que dicen".
No sólo siento que me faltaron a mí, sino a toda la sociedad, a todos nosotros.
Es por eso que mi deseo no es hacer una crítica nada más porque creo que sería negativa sin un impulso contrario a lo que critico; es por eso que mi impulso contrario está en hacer valer, desarrollar y poner en práctica nuestra conciencia como ciudadanos activos votantes, y no permitir que aduladores de la ignorancia de la idiosincrasia de nuestra sociedad como el Dr. Ginés González García (poca acción en temas de salud pública) nos traten como un pueblo necio a la hora de hacer campaña.
Esta es la única campaña que los ciudadanos podemos presentar, la única pero las más valiosa: la campaña de la conciencia al votar. Es por eso el titulo de mi artículo es "conciencia en campaña", porque aspiro a que debemos hacerla crecer cada vez más mediante nuestras virtudes y guiados por nuestra querida conciencia de que, como dije en un principio, nos guía. Una conciencia firme ante el voto nos puede guiar por un buen camino.
Se puede entender que esta forma de hacer campaña puede ser un clásico en nuestro país y que muchos me dirán que "así es la política".
Así es la política nada, porque yo creo en que existe un cierto orden y no se puede caer en la aceptación del caos actual.
Hay que darle impulso y concientizarnos de que podemos cambiar la forma de que nuestros políticos hagan campaña como corresponde (no digo que ninguno lo haga, pero deben ser todos) y por ende cambiar la forma en que realicen luego su política.

Invito a los lectores a seguir desarrollando la idea si ellos creen que es un tema importante.
Es verdad que la idea me podría haber servido para una posible candidatura en un futuro, pero preferí comentárselas a ustedes, mis compañeros de la universidad y mis conciudadanos, ya que apuesto al bien común.

Muchas gracias por el espacio.

Agustín Groppo

13 comentarios:

German Kurt Alemann dijo...

Agus, la verdad.. no puedo aportar nada.. Simplemente me parece perfecto todo lo que decis, es una falta de respeto hacia todos nosotros, la sociedad. Como siempre te digo pero, y nuevamente te lo recuerdo.. esto es Argentina hermano.. (como diria el prof. de metodologia de la investigacion) y lamentablemente los argentinos no piensan como personas, sino mas bien.. como argentinos.. por lo tanto los politicos argentinos piensan a lo argentino.. Tenemos la suerte nosotros que reflexionamos sobre estos temas de no caer en estas trampas, lo lamentable es que estas "tramuyas" de campaña son suficientes para ganarse los votos de la gente facilmente influenciable y que se podria definir "humilde" (en todo sentido, espiritual, fisico y economico, sea rico, pobre o clase media), hoy en dia el argentino (y el ser humano en general) esta perdiendo la costumbre a pensar por si mismo y se deja llevar por lo que ve. Recuerdo con "simpatia" que cuando estuve de visita en Argentina en 1999, en la tv pasaban una cancioncita que decia "menem lo hizo, con el empezo".. sin duda menem se llevo sus ventajas de esa "estupida" cancioncita.
Creo firmemente en que debe ser nuestra conciencia en guiarnos, tenemos que tratar de que esta conciencia sea no solo nuestra pero de todos los argentinos (como lograrlo no tengo idea), porque solo cuando todos (o la mayor parte) se den cuenta de lo que esta pasando y de como los politicos ganan los votos, es hay cuando finalmente la sociedad va a empezar a cambiar de rumbo y a elegir politicos competentes que realmente cumplan con su palabra sin tener que andar diciendo "dicen lo que piensan y hacen lo que dicen", porque indudablemente, a mis ojos, cualquier politico argentino que diga eso es porque en su vida politica hizo todo lo contrario.
Vuelvo a repetir, totalmente de acuerdo con lo que pusiste.
Un abrazo.

German K. Alemann

felipe dijo...

Estimado:
Creo que tu largo artículo confunde muchas cosas. Se nota tu espíritu de crítica, y tu impulso de cambio, el cual es muy valorable.
Descreo de algunas de tus afirmaciones. Creo, como estudiantes de Cs. Políticas, no hay que perder la percepción de lo que le interesa al común de la gente, y salirse del micro-clima en el cual convivimos. A la gran mayoría de los argentinos no le interesan las noticias políticas. Cuando agarra el diario si es que lo hace, van directo a la sección de chistes, y en segundo lugar, a la deportiva, y en tercero, a ver si hay nubes con lluvia en el pronóstico del tiempo. Esto es fáctico, sin ningún tipo de juicio de valor, ni nada por el estilo. El argentino promedio(como siempre dice un profesor), en relación a la política, tiene la actitud de Homero Simpson. Por eso, no creo que como decis a la sociedad le sea tan decisivo estas cuestiones públicas. Si un día, el voto se convierte en voluntario en nuestro país, me arriesgaría a afirmar que la participación en las votaciones no pasaría del 40%.

Fijate un ejemplo actual. El caso Shanska que involucra la participación de varios funcionarios de primera línea en un supuesto acto de corrupción millonario. Las primeras encuestas de opinión sobre la imagen del gobierno no han variado mucho, por este caso, y se mantienen alta la imagen presidencial. Justificado o no, es algo fáctico: la corrupción ha dejado de ser, como lo fue en la época de la Alianza, algo que modifica la conducta de los votantes. Por eso, planteo mis dudas sobre el supuesto gran interés en los asuntos públicos.

Por último, tenés razón: así es la política en la Argentina hoy con una dirigencia muy alejada de la gente y de sus necesidades concretas. Pero, esta dirigencia no es tan distinta de su pueblo. Ginés puede poner ese cartel, porque evidentemente hay mucha gente que lo comparte. Entonces, más que defenestrar a Ginés y aludir a la conciencia, miraría a nuestros costados y me preguntaría en que nos hemos convertido: una sociedad totalmente indiferente, que solamente reacciona cuando le tocan el culo o su bolsillo (ej: ahorros, inflación). Y si se lo tocan al de al lado, miro para el costado.

Estoy harto de la crítica fácil y recurrente a la dirigencia argentina, la cual-dicho sea de paso- me parece nefasta. Pero, ¿qué hacemos nosotros? ¿Alguien cree que nuestros dirigentes salen de un repollo o del horno como la torta exquisita? ¿Alguien cree que Kirchner tomo por asalto el poder? ¿O que Menem fue un patilludo que llegó caminando a la Casa Rosada? ¿Alguien conoce de alguna manifestación popular por la constante violación de la división de poderes que ejerce el gobierno? ¿Alguien se pregunta por el estado de nuestra justicia? ¿Qué lugar le cabe a nuestros empresarios, caracterizados por su visión cortoplacista? Ni que hablar de nuestros modelos familiares, o nuestra cultura. La Argentina es la tierra de Borges, Bioy y Cortazar... También, hoy, es la tierra de Marianela Mirrá, la ganadora de Gran Hermano, convertida en santa y patrona nacional para algunos. Tuvo más votos que los que va a tener seguramente el ganador de las elecciones porteñas.

Centrar nuestra crítica en los políticos sería lo más fácil y simple: muerto el perro, se acabo la rabia... Lamentablemente, la rabia se apoderó de la Argentina, no hay vacuna que nos salve tan fácilmente. Lo que hoy se necesita como bien decís es conciencia: una conciencia que guíe una autocrítica profunda. Y, a partir de eso, mucho compromiso con el país, y dejar el corazón en esta empresa que es la Argentina del siglo XXI.

MILI dijo...

Concuerdo con "el arrepentido" del poco compromiso ciudadano pero más concuerdo con Agustín cuando habla de la tan mala campaña de nuestros candidatos. Sinceramente todos los carteles que estuve viendo me causaron una sensación extraña, mmm... como definirlo… una especie de triste gracia. Cuando vi el cartel de Gines, enserio, no sabia si reír o llorar, un chiste de muy mal gusto ¡No podes hacer un cartel con tan poco contenido! Eso sin contar (opinión propia) que no se que es peor que ese tipo diga lo que piensa o que haga lo que dice. Me quedo con la primera opción.

Siddharta dijo...

Claramente, no salen nuestros dirigentes de un repollo ni los trae la cigüeña, seamos claros, las cigüeñas no existen. Sin embargo, podemos razgarnos las vestiduras hablando del Argentino medio y de la argentinidad, pero este tipo de análisis de que la culpa es de la sociedad, nos lleva a una incapacidad de accion bastante pronunciada. Quiero decir con esto que si el problema esta en la sociedad argentina, hay que cambiar la socedad argentian, pero si se afirma que los que la podrían cambiar vienen de esa sociedad y acarrean sus vicios, se imposibilita el cambio.
Falta dirigencia, es verdad, hay que cambiar la sociedad para forjar un país prospero, pero ese cambio se hace desde arriba, lo hacen los líderes que deben abstraerse de los vicios comunes.
Es por esto que coincido con agustin, se puede criticar a los politicos actuales, se los debe criticar, se los debe cambiar, para poder cambiar al país.
Los invito a recordar que somos nosotros los que los debemos cambiar, la siesta ya ha sido demasiado larga...

nacho dijo...

todo bien, barbaro, pero para mejorar hay q proponer mirar para adelante no estancarnos en el mal presente, por lo tanto abro el espacio para las propuestas.

Unknown dijo...

Como le explicas a un padre o madre de familia que no tiene trabjo y depende 100% del gobierno para subsistir que tenga conciencia? Con tu artículo te estas dirigiendo solo en la clase media o alta, que no esta mal, pero para mi insuficiente. O crees que las elecciones las gana la clase media y alta? Sin duda estas mostrando tu lado opositor al gobierno, siendo totalmente subjetivo, que le hace perder valor a tu pobre artículo.

Fran Llorens dijo...

Que un artículo sea subjetivo no le hacer perder valor. Mostrame un solo artículo de cualquier diario que sea objetivo... La subjetividad no es algo malo por definición, y la objetividad no es una meta a alcanzar en un artículo de opinión.
Por otro lado, el ámbito en que se publicó es muy reducido y está dirigido a estudiantes de Ciencias Políticas y Relaciones Internacionales de la UCA. Yo no creo que ninguno de ellos dependa del gobierno para subsistir. La conciencia que se quiere despertar es la de esos estudiantes.
No creo tampoco que tenga mucho que ver que si las elecciones se ganan con la clase media y alta o con la baja. Vos das a entender que no se ganan con la alta y la media, pero entonces, ¿el hecho de dirigirse a la clase baja justifica que se trate de idiota a los electores? Más allá de las necesidades que pueda sufrir, ¿una persona de bajos recursos no puede percibir cuando una campaña lo cree estúpido? ¿No puede exigir una campaña en donde se propongan ideas, propuestas y valores realmente?
Es cierto que, como dijeron el arrepentido e Ignacio, nuestros dirigentes no salen de un repollo. Son parte de nuestra sociedad y producto y expresión de ella. Sin embargo, lo de Ginés me parece realmente triste y habla de nosotros también.
A la vez concuerdo con el arrepentido en cuanto a la indiferencia reinante en nuestra sociedad en general en relación a las cuestiones poíticas. Existen una indiferencia y una apatía que son realmente terribles para mí pensando a futuro.
Y las propuestas de las que habló Nacho tienen que ir por ese lado para mí: evitar la quietud e incentivar a la acción. Crear una conciencia, como decía Agustín.

Siddharta dijo...

Muy bueno lo de francisco.

Siddharta dijo...

Pobre e incuo intento de superacion lo de luis oscar

Liceo RC dijo...

Fran: exquisitas tus correcciones.
Agus: sorprendente tu articulo
Luis Oscar: llamate al silencio

Manuel (estudiante de psicología de la USAL) dijo...

Francisco, me parece que si sólo pueden opinar sobre esto los estudiantes de Ciencias Políticas y Relaciones Internacionales de la UCA, deberían crear su propia Nación, ya que la política es un tema que compete a los ciudadanos, y ellos no son solamente dichos estudiantes, hay muchos ciudadanos que no tienen la suerte que tenemos nosotros de especializarnos en algo que nos apaciona. Si sólo pueden opinar las personas que pertenecen al grupo que nombrás, deberían cambiar la temática, y por ahí opinar sobre profesores que tengan uds, los precios de los bares de la UCA, y sólo temas a los que puedan acceder alumnos de de Ciencias Políticas y Relaciones Internacionales de la UCA, y no cualquier sujeto que haya encontrado esta página como "interesante". En la vida hay que salir, abrirse, conocer, hablar... se puede aprender mucho más de un buen diálogo que de un libro. Hay que pensar y cuestionarse toda la vida, pero sin dejar de darle espacio al otro, sin el cuál no seríamos nadie. Gracias por el espacio, y perdón si ofendí a alguien, saludos.

Fran Llorens dijo...

Manuel, gracias por el comentario, está bueno que el blog se "expanda" y trascienda de la UCA.
Pero a lo que yo hacía referencia simplemente era a que el propio blog nació dentro del Centro de Estudiantes y en primer término está dirigido a los estudiantes de Ciencias Políticas y de Relaciones Internacionales; el comentario de Luis Oscar dice que el artículo es insuficiente porque se dirige sólo a las clases media y alta, y justamente todo el blog se dirige originalmente a ese público.
Concuerdo plenamente en que la política compete a los ciudadanos, pero particularmente este es un ámbito de debate entre estudiantes en principio. Si el blog se hace famoso y trasciende es otra cosa (y sería buenísimo), pero originalmente está destinado a este público.
Por último, y en nombre del Centro, se agradece tu participación, y esperamos que se repita.
Saludos.

Sebastian dijo...

Estoy de acuerdo con la crítica general que hace Agus. Una de las razones por las que abandone a Telerman como candidato posible fue la falta de respeto que demuestra en sus propagandas. Esa imagen del a urna que termina siendo su cabeza, etc etc... me parece que trata de estupidos a los votantes. Como si estuviera promocionandose para delegado de 2do grado de una primaria. Pero como dijeron varios.. no lo hacen de tontos. Saben que con ese tipo de propaganda, con esos afiches coloridos y esas fotos sonrientes se llega a mucha gente, la gente sin conciencia o educacion politica-social, que no son pocos. Es lo mismo que la politica de gestos de Macri, que te puedo decir.
La gente que se da cuenta y se irrita ante esto es, lamentablemente, poca.